Se manifiestan como la expresión institucionalizada de la participación social impulsada desde el proceso de descentralización que inició la Intendencia de Montevideo en el año 1990, por lo que funcionan como portavoces de las necesidades, demandas y propuestas del barrio ante las autoridades nacionales y municipales.
Sus competencias reconocidas legalmente son: derecho de iniciativa y capacidad de propuestas en planes; proyectos y programas de interés local; asesoramiento al Gobierno Departamental y a los Gobiernos Municipales; colaboración en la gestión departamental y municipal; organización, promoción y desarrollo de actividades de interés local y participación en la evaluación de la gestión.
Los Concejales Vecinales trabajan honorariamente, y en muchos casos son representantes de organizaciones sociales, religiosas, culturales o deportivas.
Se constituyeron en los primeros actores que, junto a los funcionarios de los Centros Comunales Zonales y los de las Juntas Locales, iniciaron y facilitaron el proceso de descentralización en el Departamento de Montevideo adquiriendo representatividad a partir de elecciones vecinales directas.
Los Concejales Vecinales – a través del Concejo Vecinal- trabajan por la inclusión social a través de la solidaridad y cooperación con los sectores más vulnerables de Montevideo, promueven actividades culturales, sociales y deportivas y cooperan en el cuidado de los espacios públicos.
Entre sus funciones se encuentra la elaboración de proyectos y planes para mejorar los barrios, por lo que participan en la elaboración del presupuesto municipal proponiendo prioridades de gastos e inversiones por parte de la Intendencia y evaluando la gestión.
Actúan como agentes de desarrollo en sus territorios, construyendo una visión integral del mismo, y promueven la articulación de diversos actores para el logro de objetivos comunes como ser Comisiones de Fomento, organizaciones deportivas, religiosas, culturales sindicales, económicas, etc. Mantienen procesos de autonomía en la toma de decisiones y cuestionan la cultura de la demanda desde una cultura de participación que valora la iniciativa, la planificación y la ejecución de proyectos zonales y el control y la colaboración en la gestión pública.
A lo largo de su historia han participado activamente en la formulación de los Planes Estratégicos de Desarrollo Zonales (PLAEDEZ); Planes Quinquenales; Foros de debate ciudadano sobre la realidad y el futuro de Montevideo; evaluaciones sobre la marcha del Proceso de Descentralización (10 años de la Descentralización, Comuna en Debate, etc); debates temáticos sobre salud, infancia, patrimonio, ordenamiento territorial, vialidad, etc., realizando aportes específicos y locales a través de una mirada global.
Cabe destacar que la participación de mujeres en su integración es numéricamente cada vez más importante y comprometida.